allianz

Volvemos con la A, pero esto no quiere decir que vaya a volver a hacer un recorrido por todo el abecedario… o sí, ya veré. Hoy me voy a meter con una empresa de seguros, que los pobres logotipos no tienen la culpa de las empresas que los escogen. Como siempre, para empezar, un poco de historia. Pero poco, que estamos en Semana Santa y tampoco vamos a machacar con datos, ¿no?

Allianz se fundó en 1890 en Munich como una aseguradora para transporte y de accidentes. La fundaron Carl Thieme y Wilhelm Finck y junto con unos banqueros (de los de verdad, no bankeros), un par de industriales, un abogado, un experto en seguros (menos mal) y un político (como siempre, metidos en todos los fregados) juntaron los 4 millones de marcos (de 1890, una pasta entonces y ahora, que serían más de 100 millones de marcos, unos 50 millones de €) para formar la empresa.

Sólo 3 años después ya abren una sucursal en el extranjero (Londres) y en breve se expanden a multitud de países. Tanto es así, que en el terremoto de San Francisco de 1906 tienen que soltar un pastizal en indemnizaciones. Durante la primera guerra mundial, como es lógico, el negocio «retrocedió», pero por lo menos hicieron algo destacable en aquella época: incorporaron mujeres a la plantilla. Seguramente sería por la escasez de varones, que estarían todos llamados a filas.

Después, en el período «entreguerras» creció como la espuma, abriendo nuevas ramas como la dedicada a los vehículos y a seguros de vida. La parte «oscura» viene con la II Guerra Mundial, en la que por lo que parece, colaboró con la dictadura nazi. Hace unos años, tras investigar aquella época, decidió compensar en parte por sus actos de aquellos tiempos y pagó las pólizas a los judíos y demás personas a las que se les  había privado de los seguros por orden del régimen.

Desde entonces ha ido creciendo y ahora se encuentra en la primera posición en Europa y de las primeras del mundo.

En cuanto al logotipo, como puede verse en la imagen inferior, el original se basa en un escudo de armas que engloba a los de las dos ciudades natales de la empresa: Berlin y Munich, con clara referencia al águila imperial alemana. En 1923, el artista Karl Schulpig modifica la imagen de la empresa y crea un águila de líneas estilizadas con otros 3 jóvenes aguiluchos dentro, representando a las nuevas líneas de negocio de la empresa.

Años después, en 1977, el diseñador Hansjörg Dorschel elimina y «limpia» un poco más el logo y lo mete dentro de un círculo, que por lo que hemos visto en esta serie, quiere representar fuerza, firmeza, confianza,…

Unos pocos años después, en 1999 modernizan el logo, dejando 3 lineas verticales en las que se puede apreciar el famoso águila marca de la empresa y que representan las 3 áreas de negocio de la compañía (seguros, jubilaciones y gestión de activos).

En cuanto al color, el azul, en estos casos suele querer representar la excelencia, supremacía y magnificencia de la compañía. Que no sabía yo que un color quiere decir tantas cosas. Va a tener razón Robert de Niro cuando le pregunta a Ben Stiller si ha escogido el mismo el color del coche de alquiler.

 

Schindler

No, no voy a hablar de una lista, si no de una empresa de la que es fácil que hayamos utilizado algo suyo casi a diario y sin darnos cuenta.

 

Esta empresa se dedica, principalmente a «movernos», tanto vertical como horizontal y diagonalmente: hacen ascensores, escaleras mecánicas y pasarelas, entre otras cosas similares.

La compañía es más que centenaria, ya que se fundó en 1874. Como viene siendo habitual y debido a que dedican todas sus neuronas a diseñar sus productos sin dejar ninguna libre para dedicarla a tareas menores como el nombre con el que bautizar a su recién creada empresa, ésta comenzó denominándose Schindler & Viliger, dado que los fundadores eran un tal  Robert Schindler y Eduard Viliger. Imaginación al poder.

Que me imagino que será una de esas cosas que se dicen: oye, como no sabemos si esto va a tirar para adelante, ponemos lo primero que se nos ocurra (bueno, lo segundo, que lo primero fue un chiste macabro, que tratándose de una empresa dedicada a fabricar montacargas y ascensores no causaba muy buena sensación) y si eso, si no nos vamos a pique como el típico transatlántico de lujo que se choca con un iceberg (recordemos que es 1874, años antes de la tragedia del Titanic, pero ya se puede apreciar la gran visión de futuro que tenían estos hombres), ya buscamos un nombre decente. Y es una de esas cosas que se van dejando y nunca te pones a ello porque te gana siempre la pereza.

A lo que iba, que la empresa se fundó en 1874, en Lucerne, Suiza. En 1890 crearon el primer ascensor hidráulico. Un par de años después, Viliger deja la empresa, y en lugar de aprovechar la oportunidad para poner un nombre interesante, riza el rizo y llama a su empresa Robert Schindler Machinery Manufacturer.

La compañía continuó su crecimiento, y fue pasando por diferentes parientes de Robert, así que decidieron cambiar el nombre, y siguiendo con la tradición de no dedicar más de un segundo, pasó a denominarse Schindler & Cie oHG.

Y desde entonces, no ha parado de crecer. Hoy es una de las más importantes en su entorno. Y el logo… curioso.

Eso que se ve en la parte de abajo, no es una montaña, ni nada parecido es… un compás, como se puede ver en el logotipo original:

Unos años más adelante decidieron simplificarlo, y se quedó en el ángulo que (casi, con el cambio que comentamos más abajo) dura hasta hoy:

Años más tarde, en 1985, decidieron cambiarlo por uno que representase más a los elevadores que eran la parte más importante de la empresa mediante unas líneas verticales rojas.

No sé si porque la metáfora era un tanto rebuscada o directamente porque el logo no era muy atractivo y causaba tortícolis a los incautos que intentaban leer el nombre de la empresa, que tomaron la resolución de volver a sus orígenes, eso sí, con un aire del futuro ya que en el año 2006 era lo que se llevaba, dotando a la imagen de cierta profundidad pasándola a las 3 dimensiones, que es el logo que ilustra esta entrada al comienzo.

dove

Después de muuucho tiempo sin hacer nada para esta sección, vuelvo con una (pequeña) entrada:

Esta marca es realmente una rama de la multinacional Unilever, empresa europea que nos encontramos a diario en alguna de sus 400 marcas. Unilever se creó en 1930, con la fusión de Margarine Unie, Compañía holandesa de margarina, y Lever Brothers, fabricante inglés de jabones como Dove.

Y aquí es donde vamos a nuestra pequeña historia sobre el logo: Lever Brothers (o la división de Unilever dedicada a los jabones) empezaron a fabricar sus productos como ayuda al personal militar allá por 1950. La armada necesitaba jabones especiales para poder luchar contra los constantes ataques que el agua salada y la arena llevaban a cabo contra la piel de los pobres marines. Así, con sus productos mejoraron la salud cutánea de los militares, mejorando la hidratación de su epidermis. Cuando se vio que los jabones daban buen resultado, la compañía decidió, en 1957, comercializarlo. Y qué mejor logotipo y nombre que el de una palomita de la paz (dove, en inglés significa paloma) que representara el propósito original de la fabricación de esos jabones.

¿Cómo? ¿Pero la idea no era mejorar la salud (cutánea) de los militares y que pudiesen dedicarse en mejores condiciones a su trabajo? Bueno, sí, pero así es como le gusta venderlo a la empresa.

Por cierto, hoy en día, toda la publicidad de Dove gira en torno a «gústate cómo eres», sin utilizar estereotipos, «por la belleza real», buscando modelos con una figura real, y no demasiado delgadas, intentando levantar la autoestima de las mujeres. Pues bien, la empresa matriz, Unilever, son los mismos que los anuncios de Axe, en el que tratan a las mujeres como objeto. ¿Coherencia? ¿Y eso qué’e’lo’que’e?

Bosch

De vuelta por esta sección un tanto olvidada, hoy vamos a ver qué es lo que es el logotipo de la empresa Bosch.

Primero, y como suele ser habitual, un poquillo de historia. Pero poco, que tampoco es cuestión de saturar vuestras mentes con datos que, como mucho servirán para una entrevista de trabajo en esta empresa.

Aunque todos la conocemos como «Bosch», el nombre correcto es Robert Bosch GmbH. No sé si para diferenciarla de otras con nombre similar, como esta cervecera. El caso es que la empresa que nos ocupa se fundó en Stuttgart en 1886, por un señor que se llamaba… (otro premio a la imaginación… y van…) Robert Bosch. Dejo la labor de averiguar de dónde viene el nombre de la compañía al lector avispado.

Esta empresa se centra principalmente en componentes de automoción, productos industriales y bienes de consumo. Tiene sucursales por más de 60 países y se vende en unos 150. Lo que no está mal, teniendo en cuenta que hay menos de 200 países declarados oficialemente.

La historia no es que sea tremendamente emocionante: se pusieron a producir «cosas», a investigar y poco a poco fueron haciéndose más grandes y expandiéndose.

Y ahora lo que todos estabais esperando… el logo.

Pues es bien sencillo:  El logotipo representa un sencillo magneto (esto, no este Magneto), uno de los primeros productos de la compañía. Y apenas ha cambiado desde los comienzos. Ni los colores ni nada. Vamos, que el presupuesto de I+D no dedica nada al cambio de imagen. Eso sí, logotipo clásico: imagen redondeada para dar sensación de fuerza, firmeza y confianza y letras rojas «negritas», sin florituras.

Montblanc

Vamos a ver si esto queda claro:

Se acercan las navidades, ya está aquí la época de los regalos y por si acaso a alguien le sobra algo… aquí dejo una idea, así, disimulando (poco y mal). A lo que iba.

Esta marca fue fundada por tres hombres de negocios en 1906, hace más de 100 años. Estos mozos, que casualmente y en contra de lo que suele ser habitual ninguno se llamaba Montblanc (Claus Johannes Voss, Christian Lausen y William Dziambor) cuanto crearon su empresa de estilográficas de lujo se pusieron de acuerdo en que la montaña más alta de Europa podría ser un buen símil sobre lo que ellos esperaban de la empresa: llegar a lo más alto. Parece que lo han conseguido, y han ampliado su sector a otros ligeramente relacionados pero todos bajo el «paraguas» del lujo: relojes, bisutería, perfumes,… Aunque sus comienzos fueron muy sencillos: «Fabricantes de plumas de oro de alta calidad«. Y cuando digo sencillo me refiero a simple, que no se liaron con muchas cosas, no como sinónimo de austero.

El nombre de Montblanc no se registra hasta 1910, y el logotipo en sus comienzos fue sólo un punto blanco, que simbolizaba la nieve de la cumbre de la montaña. Más adelante, en 1913, modificaron el simple círculo blanco por la estrella redondeada que todavía hoy perdura.